Estos tres términos: autoridad, influencia y fama pueden ser terriblemente confundidos e inclusive usados como sinónimos en muchos círculos de manera indiscriminada. Me propongo reflexionar un poco sobre esto:
¿Que es ser una autoridad?
Ser una autoridad, es poder persuadir; es alguien que se gana una reputación sobre temas específicos y es respetado y valorado por colegas de la industria. Es algo que se gana a pulso, con pensamiento, opinión y puntos de vista. Denota respeto. En términos de negocios, el poder de la persuasión se transforma en ventas.
Puede involucrar como variables desde la formación académica, la experiencia a largo plazo y las publicaciones al respecto.
Las autoridades en ciertas materias no son necesariamente famosos (celebridades) ni viceversa, si bien, muchos pueden serlo.
Una autoridad en un tema se vuelve referente (links, co-citación, invitaciones a eventos, conferencias y charlas)
¿Que es ser famoso o una celebridad?
Son personas muy conocidas aunque su renombre no es producto de su mérito real o respeto, opiniones o ideas. Al no implicar respeto y depender de las masas, es algo voluble, temporal, que puede pasar muy rápidamente de moda.
¿Se puede ser famoso y no ser una autoridad? Sí, así es.
¿Se puede ser una autoridad y no ser una celebridad? De nuevo la respuesta es sí.
¿Es posible ser una autoridad y ser famoso a la vez? Pero claro.
Vivimos una época donde la influencia derivada de la fama, supera con creces a la autoridad. Vale la pena tenerlo en cuenta.
La influencia deriva de la cantidad de seguidores en redes sociales, las apariencias y el apoyo de los medios masivos de comunicación.
El apoyo de un famoso no necesariamente beneficia a una marca personal o institucional, no sustituyen a una idea o a un enfoque, tampoco establece credibilidad con los consumidores. El aval de los famosos funciona mejor cuando la celebridad es creíble en nuestro nicho y son consistentes con nuestro pensamiento.
Concluyendo: fama y autoridad pueden ayudarnos en nuestras finanzas por separado;sin embargo, juntas, generan excedentes en nuestro balance.
Leer también: comunicación escrita, construyendo reputación, crear el tipo equivocado de contenido
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