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Qué es psicología. La psicología es conocida como la ciencia que se encarga de estudiar el comportamiento humano y animal, haciendo uso de múltiples enfoques con la finalidad de analizar, comprender y predecir la conducta de los organismos.

Una definición que nos permite entender, en términos básicos, el concepto de esta disciplina tan conocida a nivel mundial. Pero, ¿cuántas áreas de la psicología podemos encontrar? La verdad es que nos estamos refiriendo a una de las ciencias más integrales que existen, y, por ende, basada en una amplia variedad de clases.

Conozcamos, en los próximos apartados, las distintas maneras en que podemos llegar a comprender la psicología.

Inversa

Cuando hablamos de psicología inversa, nos referimos específicamente a una técnica que se usa para persuadir, lo que es posible a través de la afirmación de un comportamiento opuesto al deseado.

Ante dicha afirmación, se supone que una persona actuará de una manera completamente contraria a esta, lo que puede funcionar como una forma de controlar su conducta. Este proceso ocurre debido a la reactancia, un fenómeno del tipo psicológico que explica que los individuos tienden a actuar de manera opuesta a las órdenes que reciben cuando se sienten persuadidos.

En consecuencia, la reactancia hace que una persona responda de manera opuesta a como se le indica, y en este sentido, pudiera estar siendo persuadida si lo que se quiere es, específicamente, que actúe de forma contraria a las órdenes que recibe.

Clínica

La psicología clínica corresponde a un área de especialización de la psicología que se ocupa del estudio de aquellos factores que pueden incidir en la salud mental de una persona. De esta forma, son la evaluación, investigación, tratamiento, diagnóstico y rehabilitación de todos los trastornos presentes en la salud mental parte de sus principales prácticas.

Podría decirse que la psicología clínica es una de las áreas más conocidas dentro de esta disciplina, debido a su amplia aplicación. Algunos enfoques de la psicología clínica pueden diferir entre sí, precisamente, en la atribución de algunos trastornos en la conducta.

Por ejemplo, algunas vertientes de la psicología clínica parten de los enfoques freudianos, mientras que otros, por su parte, hacen énfasis en un enfoque más conductista-cognitivo, encontrando serias diferencias entre el ejercicio de los psicólogos clínicos.

Forense

La psicología forense es una derivación de la psicología jurídica, la cual se encarga de prestar apoyo en el abordaje de procesos judiciales, sirviendo de ayuda en diferentes investigaciones y consultas en tribunales y cortes. Su tarea es analizar toda la información del tipo psicológica relativa al entorno de un determinado escenario, a fin de proporcionarla como parte de los datos en cuestión.

Su aplicación permite obtener información de valor de testimonios, símbolos de violencia, artículos relevantes en el discurso, etc. Gracias a la psicología forense, es posible ofrecer asesoría de cara a todos estos elementos, aproximando a los observadores a datos de gran valor para el dictamen final.

Industrial

La psicología industrial se encarga del estudio de la conducta humana en su entorno laboral, haciendo énfasis en los factores que inciden en esta conducta, presentes tanto en sus espacios de trabajo como en su hogar.

Bajo este enfoque, la psicología industrial busca, entre sus objetivos, comprender de qué manera los espacios de trabajo pueden favorecer la conducta laboral. Para ello, son realizados estudios de ergonomía, donde se busca determinar aquellos agentes que pueden reforzar el rendimiento de una persona en su espacio de trabajo.

La intervención de un psicólogo industrial es indispensable en toda área de trabajo, ya que este puede ofrecer una serie de herramientas que mejorarán sustancialmente el desempeño de sus empleados. También, se asegurará del bienestar de todo el personal que conforma a una empresa, permitiendo que esta pueda aproximarse a sus objetivos de manera satisfactoria.

La psicología industrial, en síntesis, está basada en comprender la relación entre el trabajador y el trabajo, y viceversa, determinando de qué manera esta correlación puede mejorar progresivamente, haciendo énfasis en el bienestar y desempeño de las personas que coexisten en una empresa.

Holística

La psicología holística es un área de aplicación dirigida, al igual que la psicología clínica, a la evaluación, diagnóstico, tratamiento, análisis e investigación de trastornos que afecten la salud mental de una persona.

Sin embargo, se diferencia en gran medida de la psicología clínica en lo que respecta a la atribución y concepción de los trastornos. En primer lugar, como su nombre lo indica, la psicología holística reconoce al ser humano como un todo, por lo que su abordaje está basado en agrupar, no solo agentes psicológicos, sino también aspectos fisiológicos, espirituales y culturales respectivamente.

De esta manera, la psicología holística se basa en el estudio de la totalidad humana, comprendiendo el abordaje exhaustivo de todos los elementos que constituyen a un individuo. Su base fundamental advierte que los trastornos psicológicos parten del alma, por lo que muchos de sus métodos terapéuticos están basados en el estudio del espíritu, la mente y el cuerpo.

A su vez, parte de los estudios de la psicología holística reconocen la existencia del inconsciente, por lo que sostiene la importancia de su estudio y comprensión. Solo así será posible erradicar aquellos problemas que afectan la salud mental de una persona. Debe existir una transformación general para poder abordar cualquier tipo de trastorno del tipo psicológico.

Cognitiva

La psicología cognitiva es un área de la psicología que se encarga del estudio de los procesos mentales complejos, empleados por el ser humano para la resolución de problemas. Estos procesos le permiten capturar y codificar información, permitiéndole adaptarse correctamente a su entorno al respecto.

El estudio de la psicología cognitiva forma parte de la evolución en sus métodos de estudio, los cuales datan para los años 60, en los que se determinó que era importante reconocer la existencia de procesos psicológicos que ocurrían en los individuos. En este contexto, recordemos que el enfoque conductista, el cual rechazaba el concepto de la mente, era el predominante hasta ese entonces.

Así, la psicología cognitiva constituye uno de los puntos más importantes en la evolución de la psicología, ya que ha logrado unificar el estudio de los procesos superiores en conjunto con la conducta observable. El resultado, un sistema de abordaje complejo, capaz de ofrecer explicaciones de gran alcance sobre el comportamiento humano.

Respectivamente, los procesos que la psicología cognitiva estudia son el aprendizaje, el lenguaje, la memoria, la atención, el pensamiento y la percepción. De esta forma, puede explicar la forma en que el ser humano distribuye, por ejemplo, sus recursos atenciones, y realiza determinadas tareas de manera coordinada y ordenada.

Social

La psicología social es un área que se encarga del estudio de la conducta humana como el resultado de su interacción con su entorno, entendiéndolo como el resultado de todos aquellos factores del tipo social que han incidido en su comportamiento. Para ello, la psicología social realiza múltiples abordajes de cara a comprender, no al individuo, sino a los individuos como partes de una sociedad.

El abordaje de la psicología social es clave para la explicación de múltiples fenómenos presentes en el espectro social, así como para entender de qué manera los individuos se integran a los grupos, y a través de estos, adquieren una identidad que les permite desarrollarse completamente.

Estos estudios son realizados a través de trabajos de campo, donde se recolecta información con múltiples métodos según sea el caso. Así mismo, la psicología social cumple un papel importante en el estudio de pequeños grupos como tribus, sociedades aisladas, contextos penitenciarios y demás escenarios.

La psicología social forma parte de una de las herramientas más importantes de la psicología como disciplina, ya que permite comprender la constitución de una sociedad, así como la manera en que esta se relaciona. Es un enfoque que nos permite comprender todos los procesos implícitos en nuestros grupos.

Oscura

Cuando hablamos de la psicología oscura, nos referimos a un conjunto de rasgos psicológicos caracterizados por implicar comportamientos dañinos ante la sociedad, como lo es la psicopatía, o la manipulación. No existe la psicología oscura respectivamente, y no debe confundirse, en tal sentido, con áreas como la psicología forense y la psicología criminal.

Podría decirse que la psicología oscura es un área alternativa, la cual se emplea para hacer referencia a múltiples trastornos presentes en la salud mental de una persona, los cuales, frecuentemente, hacen referencia a características negativas. De esta forma, la psicología oscura explica mayormente patologías que terminan por afectar a quienes rodean a una persona.

No obstante, es necesario acotar que la psicología oscura no tiene que asociarse a personas criminales, pero sí con ciertos trastornos en su personalidad, los cuales pueden afectar seriamente su vida social.

Conclusión ¿Qué es psicología?

La psicología es, en definitiva, una disciplina que presenta múltiples facetas, las cuales continúan generando grandes aportes a la sociedad, permitiendo aumentar la comprensión del comportamiento tanto humano como animal. Un área de estudio que, a pesar de no ser considerada una ciencia sólida, ha demostrado grandes hallazgos desde su consolidación en 1879.

Si bien estas no son todas las áreas de la psicología, podríamos decir que forman parte de las más conocidas, y en tal sentido, las de mayor expansión hasta el momento.

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Recurso externo: Wikipedia