Hablemos un poco de la fundación de São Paulo, Brasil, no sin antes señalar que en este año 2014 se cumplen 450 años de esta y por tanto es una fecha destacada en la efemérides brasileña.
En 1532 Martim Afonso de Sousa funda el primer pueblo del Brasil, Sao Vicente. São Paulo de Piratininga apareció el 25 de enero de 1554; allí se construyó una escuela jesuita por cuenta de 12 sacerdotes, entre ellos Manuel da Nóbrega y José de Anchieta, entre los ríos Tietê, Anhangabaú y Tamanduateí. Dicho colegio funcionaba en un choza de tierra apisonada y sirvió para catequizar a los aborígenes de la zona de la meseta de Piratininga, separada de la costa por la Serra do mar, llamada por los indios, «Serra de Paranapiacaba».
El nombre de São Paulo fue elegido a que ese día se conmemoraba en el calendario católico la conversión de Pablo de Tarso. Ese mismo día el sacerdote Manuel de Pavia realiza la primera misa en la colina, marcando el inicio de la actividad jesuita y el nacimiento de la actual ciudad de São Paulo.
Dos años más tarde lograrían edificar la primera iglesia, el primer edificio permanente en el pueblo. Alrededor del colegio y de la iglesia se construyó un pequeño pueblo de indios convertidos, jesuitas y colonos.
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