Introducción: ¿Qué dice la Biblia sobre el aborto? También se reconoce ocasionalmente como la expiración del embarazo. El embarazo se termina ya sea tomando tabletas o pasando por un proceso quirúrgico.
Contexto antiguo
Los abortos se experimentaron en tiempos bíblicos, mientras que los métodos variaban significativamente de los contemporáneos. Por ejemplo, el médico griego del siglo II, Sorano, sugirió el ayuno, las sangrías, los saltos enérgicos y el transporte de cargas pesadas como medio para acabar con la gravidez.
El tratado de Soranus sobre ginecología reconoció diferentes escuelas de pensamiento sobre el tema. Consultores terapéuticos específicos prohibieron el uso de cualquier método sin éxito. Otros las permitían, pero no en los casos en que se proyectaban para encubrir un vínculo adúltero o simplemente para preservar las buenas apariencias de la madre.
En otro sentido, la Biblia se imprimió en un mundo donde el aborto era hábil y observado con matices. Sin embargo, los hebreos y los griegos dijeron la misma palabra, «aborto», no busques ni en el Antiguo ni en el Nuevo Testamento de la Biblia. Es decir, el tema simplemente no se plantea abiertamente.
Significado biblico del aborto
Sin embargo, la inexistencia de una aparente referencia al aborto no ha impedido que sus oponentes o partidarios busquen en la Biblia apoyo para sus posiciones.
Los opositores al aborto recurren a numerosos manuscritos bíblicos que, tomados en su totalidad, parecen proponer que la vida humana tiene valor antes del nacimiento. Por ejemplo, la Biblia comienza describiendo la formación de los humanos «a imagen de Dios»: una forma de clarificar el valor de la vida humana, aparentemente incluso antes de que nazcan las personas.
De manera similar, la Biblia describe numerosas figuras significativas, contando a los profetas Jeremías e Isaías y al apóstol cristiano Pablo, como conocidos por sus tareas sagradas mientras estaban en el útero.
Sin embargo, los enemigos del aborto no son los únicos que pueden apelar a la Biblia en busca de apoyo. Los devotos pueden señalar otros textos de las Escrituras que parecerían contar como prueba a su favor.
Por ejemplo, recomienda que la vida de una mujer embarazada sea más valorada que la del feto. Este texto define un escenario en el que los hombres que se pelean golpean a una mujer embarazada y le provocan un aborto. Se impone una multa económica si la mujer no sufre ningún otro daño más allá del aborto espontáneo. Pero, si la dama sufre un daño extra, la pena del que la comete es la de sufrir un daño común, hasta la vida para toda la vida.
Otros textos de las Escrituras buscan celebrar las selecciones de las damas para sus cuerpos, incluso en contextos en los que tales selecciones se habrían evitado informalmente. La quinta sección del Evangelio de Marcos, por ejemplo, define a una mujer con una enfermedad ginecológica que la ha hecho explotar continuamente corriendo un gran peligro.
Extiende la mano para tocar el manto de Jesús con la esperanza de que la calme; sin embargo, se suponía que el toque de una dama de época era motivo de contaminación ceremonial. Pero, Jesús elogia su elección y admira su fe.
Del mismo modo, en el Evangelio de Juan, la partidaria de Jesús, María, aparentemente desperdicia fuentes al verter un frasco entero de ungüento costoso en sus pies y usar su propio cabello para secarlos; sin embargo, él protege su conclusión de romper el tabú comunal en torno a tocar una persona no relacionada. hombre tan de cerca.
Mitos sobre el aborto: ¿Qué dice la Biblia sobre el aborto?
Existen los siguientes mitos sobre el aborto
La Biblia prohíbe el aborto.
No debería ser un problema lo que dice la Biblia sobre el aborto. Estados Unidos no es una teocracia. Aún así, dada la certeza de los enemigos del aborto de que el aborto perturba la Palabra de Dios, podría ser una sorpresa que ni el Antiguo Testamento ni el Nuevo declaren el aborto, ni un solo término.
Tampoco es que el Antiguo Testamento sea discreto sobre los cuerpos de las mujeres. La menstruación se convierte en mucha cortesía. Lo mismo ocurre con los niños: el nacimiento, la esterilidad, el deseo sexual, la prostitución, la infidelidad y la violación. ¿Cómo es posible que los autores establezcan lo que debe ocurrirle a una mujer que busca ayudar a su marido en una pelea agarrándole los testículos al otro hombre pero no siente que el aborto se valore ni con una sola palabra?
Dadas las consecuencias de no tener relaciones sexuales conyugales y ser presa de una violación, es difícil creer que las mujeres nunca necesitaron importancia para terminar con la gravidez y que no hubo información habitual sobre cómo hacerlo, como en otras culturas más antiguas. Las parteras habrían reconocido cómo provocar un aborto.
El aborto es inseguro.
La literatura contra el aborto está ocupada con historias sobre mujeres gravemente heridas o incluso muertas en hospitales. Tales lugares ocurren: una mujer murió en la clínica de Filadelfia de Kermit Gosnell, algunas resultaron heridas y todas recibieron menos atención.
Steven Brigham ha estado en problemas legales en varios estados. Esos médicos entran en el mercado porque son baratos, están en el barrio, practican abortos más tarde de lo que permite la ley y se concentran en pacientes de bajos ingresos que, por desgracia, están acostumbrados a que las personas con autoridad los traten con seriedad.
Sin embargo, solo en la atención del aborto, los raros malos proveedores manchan a todos los demás, y los manchan tanto que los opositores pueden permitir leyes que efectivamente cerrarían todo el campo en nombre de la seguridad persistente.
Hay demasiados abortos.
Ocasionalmente, la gente quiere decir que hay demasiados abortos porque queremos ayudar a las niñas y mujeres a hacerse cargo de su sexualidad y tener más opciones en la vida. Según la Organización Guttmacher, en 2011, el aborto disminuyó en un 13 por ciento desde 2008, generalmente debido a un mejor acceso a los métodos anticonceptivos y a los sistemas reguladores de la natalidad de acción más prolongada, como el DIU.
No obstante, las personas a menudo quieren decir que las mujeres son demasiado espontáneas sobre el sexo y el control de la natalidad. Cuando Naomi Wolf describe los abortos de Chardonnay de sus amigas, dice que las mujeres se quedan embarazadas por casualidad porque son hedonistas y superficiales.
Es problemático criticar duramente el aborto como algo deshonesto, insistir en que el número ideal de abortos es cero, como lo logra Will Saletan, sin culpar a la mujer individual que se metió en un lío y ahora necesita hacer algo malo para salir. de eso
Ética bíblica en una sociedad mundana
Sin embargo, antes de que examinemos cuidadosamente lo que dice la Biblia sobre el aborto, debemos abordar algunas de las primeras objeciones. Mientras tanto, quienes apelan a la Biblia en esta disputa son con frecuencia cristianos y judíos convencionales para quienes la Biblia tiene autoridad ética prima facie.
Sus oponentes a favor del aborto frecuentemente los culpan por luchar para «predicar» la bondad bíblica a los miembros de una sociedad mundana. Y, cuando las personas pro-vida usan la autoridad moral de la Biblia para abogar por leyes que prohíban el aborto y castiguen a los involucrados en practicar abortos, son acusadas de «establecer la religión». Se les acusa de imponer la «teocracia» a los habitantes de una organización fundamentalmente secular y autónoma.
Leer también: ¿Qué es el adulterio en la biblia?; ¿Qué dice la Biblia sobre el amor?; Definición de aborto
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