Wolfgang Amadeus Mozart-historia

Wolfgang Amadeus Mozart-historia.

Al visitar dicha ciudad, pide a su prima Maria Anna Thekla que venga a su lado (tal vez previendo el encuentro suyo con Aloysia y de tal forma que su padre se sienta “seguro” al respecto). Allí verá, para la navidad de 1778 a Aloysia aunque esta ya no le veía con buenos ojos y Mozart sabe que junto a esta joven no tiene futuro y se siente decepcionado y triste.

Mozar llegaría, a regañadientes, a la ciudad de Salzburgo, el 15-16 de enero de 1779, para sumir su cargo de organista de la corte y concertino, con un salario anual de 450 florines, algo semejante a lo que recibía su padre. El 17 de enero se redacta el decreto nombrándole organista; 10 días después Mozart cumple 23 años. Hasta su hermana Nannerl le recrimina por la muerte de su  madre. Dos años duraría al servicio del príncipe arzobispo de Salzburgo, señor Colloredo, «acumulando escasos florines para pagar las deudas, esperando huir de nuevo de esta ciudad, esta corte y este trabajo tan detestados.» Mientras reanuda la correspondencia con su prima.

El 5 de noviembre de 1780 emprende un viaje en solitario (por primera vez) durante seis semanas a Munich.

1781-1791, estancia en Viena

Mozart mismo se trasladó a Viena en marzo de 1781, empezando a cosechar éxitos musicales y más tarde, en mayo de ese año fue por un tiempo, un inquilino en la casa de Weber. Fridolin el padre había muerto en 1779, Aloysia hacía unos seis meses que había dejado el hogar (aunque al comienzo, viviera con su marido al lado de su madre), y la madre Cecilia y las otras tres hermanas vivían de la renta que producían los inquilinos.

En septiembre de dicho año, Mozart abandona la casa Weber, pero al parecer, Wolfgang se ha interesado en la tercera hija, Constanza. Aunque muchos autores vean en esta relación, más amistad que pasión.
Cuando los dos se casaron el 4 de agosto de 1782 en la catedral de San Esteban, Mozart (quien seguía aguardando la bendición paterna para su relación) se convirtió en cuñado de Aloysia[3]. Aparentemente no hay a largo plazo mayores resentimientos, dado que Mozart escribió una buena cantidad de música para ser cantada por Aloysia.
Para octubre de 1782 se sabe que Mozart tiene algunos roces con Constanza por asuntos netamente culinarios (añoraba la comida de su casa y de su región y al parecer su esposa no era tan buena cocinera). El músico vuelve a dictar clases de música a las condesas Zichy y Rumbeck, a la señora Trattner a la que se une, empezando 1783, la condesa de Palfy, completando el número de 4 alumnas, que de acuerdo con sus proyecciones le darían la independencia económica.
Juntos tendría seis hijos: Raimund Leopold (17 de junio al 19 agosto 1783), Karl Thomas (21 de septiembre 1784-31 de octubre de 1858), Johann Thomas Leopold (18 de octubre- 15. Noviembre 1786), Theresia Konstantia Adelheid Friderika (27 de diciembre 1787- 29 de Junio 1788), Anna Maria (16 de Noviembre 1789-25 de diciembre 1789) y Franz Xaver Wolfgang (26 de julio 1791-29 de julio de 1844).
Esto le permite cambiar de domicilio, se cambia de la llamada casa del «sable rojo» Hohe Brücke número 387 (aquí había vivido Mozart con sus padres en 1767) a una casa del barón Wezlar (judío converso). En marzo de 1783 vuelve a cambiar de casa, esta vez se pasan para una acogedora casa sobre el Kohlmarkt y luego para otra ubicada en el denplatz número 244, piso primero. El mismo barón Wezlar asumió los gastos de los acarreos y demás. Por este tiempo Mozart conocería al abate Lorenzo Da Ponte (Emmanuel Conegliano), futuro libretista de Las Bodas de Fígaro, Don Giovanni y Cosi fantutte (algunas de las obras más famosas de nuestro músico, que hasta este instante había compuesto un sinnúmero de obras que pretendo reseñar al final de esta historia).
Todavía Leopoldo no se siente muy a gusto con Mozart lejos de su hogar y mucho menos casado con quien creía no le convenía; mismo parecer de su hermana Nannerl, quien ya tiene 32 años y sigue soltera.
El 19 de agosto de 1783 sepultan a Raimundo Leopoldo en el cementerio San Ulrico, en Neustift, cerca de Viena.
Se vuelven a cambiar de casa, pues los recuerdos amargos de su hijo perdido persiguen a los esposos Mozart.Se mudan sobre el Graben, el piso tercero de la casa Trattner.
El 27 de enero de 1784 cumple Mozart 28 años, no le quedan sino 8 años de vida.El año nuevo le trae la noticia que Constance está de nuevo embarazada. Decide volverse más organizado con sus composición , ingresos y egresos; organiza por ejemplo conciertos por suscripción, juntando hasta 174 suscriptores entre la crema y nata de la sociedad de su tiempo.Todo este torbellino de actividad le sirve de disculpa para no asistir al matrimonio de su hermana Nannerl, con el barón Johann-Baptist von Berchtold zu Sonnenburg, consejero y juez cerca de Salzburgo; Nanerl tiene 33 años y él 45,ella doncella y él dos veces viudo y tiene cinco hijos de sus anteriores relaciones.
Leopoldo Mozart se queda entonces solo en su gran apartamento de la Hannibalplatz
El primer día de otoño, 21 de septiembre de 1784, Constance Mozart trae al mundo a su segundo hioj, Karl Thomas (quien sobrevivirá a su primera infancia). Poco después los Mozart cambian de vivienda, ahora se trasladan a la casa Caesina, en la Schulerstrasse número 846. La situación económica le sonría al joven «alemán» (porque se siente Alemán antes que Austriaco) y en esta casa podrá dar pequeños conciertos, pagando un alquiler anual de 460 florines.
Muchos autores opinan que Teresa von Tratter y Mozart llegaron a tener relaciones demasiado íntimas y por este motivo era preferible cambiar de casa.
También en diciembre de 1784 Mozart se adhiere a la francmasonería, con el grado de aprendiz de la logia vienesa de la Beneficiencia (Die Wolhltätigkeit). Tenía muchos amigos en este tipo de actividades desde Mannheim.
El espíritu de la francmasonería estaba muy cerca del pensamiento de la Aufklärung y que se conocerá como iluminismo. Era Mozart, efectivamente un amante de la libertad, la igualdad, la fraternidad, convencido de la necesidad de intercambios recíprocos y de un trabajo comú para hacer progresar a la humanidad, avanzar las artes y las ciencias.

En 1785 comienza Mozart a considerar la posibilidad de poner música a una comedia francesa (había superado la idea de hacerlo con un libreto alemán), transformada por necesidades de la causa en ópera italina: Le Nozze di Fígaro. Hacía un año que había sido puesta en escena esta obra de Beaumarchais.
[1] Casado con Maria Teresa Stamm (1727-1793)
[2] En 1788 se casaría con el violinista Franz Hofer. Posterior a la muerte de Mozart volvería a casarse, esta vez con Mayer, actor de la compañía Schikaneder.
[3] Wolfgang se refería a ella como La Lange…”es una falsa y mala persona, y una coqueta”.

Maria Anna Thekla Mozart

Maria Anna Thekla Mozart[1] (25 de septiembre de 1758- 25 de enero 1841), era hija de Franz Aloys Mozart (Tío de Wolfgagn Amadeus) y de María Victoria Eschenbach. Había nacido en Augsburgo, Alemania, y era la tercera hija de este matrimonio (y la única superviviente del mismo) que en total concibió cinco mujeres.
Entre el 11 y el 26 de octubre del año de 1777, conoce a su primo Wolfgang Amadeus. La Bäsle (la primita), como le llama Mozart, se convierte al instante en una gran compañera del genio musical, entendiéndose muy bien. El 19, ella 21; se dice que su cercanía incluía relaciones íntimas. No lo sabemos a ciencia cierta.
Sobre su primita escribe Wolfgang: “Nuestra prima es bella, inteligente, amable, razonable y alegre; esto se debe a que ha frecuentado el mundo; ha pasado algún tiempo en Munich. Es cierto que nos divertimos mucho, ya que posee una mente muy aguda y observadora. Juntos nos burlamos de la gente. ¡Que gran placer!”[2]
Juntos bromeaban y muchas de sus bromas eran fuertes, siendo corriente que emplearan expresiones como «Leck du mich in Arsch», que traducidas a nuestro florido castellano sería como “vete a la mierda”. En las cartas que intercambiaran con el paso del tiempo se seguirían manejando esta clase de gruesos calificativos. Todo parece indicar que era tal la química entre ellos, que Franz alcanzó a sugerir que no se opondría a un posible noviazgo entre ellos.
Los juegos de Maria Anna y Wolfgang incluían transformar las cosas y las personas, por ejemplo, alguna vez hizo disfrazar a su primita, haciéndola “vestir a la francesa”, algo que puede querer decir que le pide a Maria Anna, mostrar un poco sus hombros y su pecho.
Se conservan en total diez cartas de Wolfgang a Marianne (así le decían a Maria Anna), donde los apuntes sexuales están a la orden del día, tanto como los episodios. Por decir algo, en la primera de esas cartas, enviada el 5 de noviembre de 1777, dice, entre otras cosas: “Me escribís diciendo que mantendréis la promesa que me hicisteis a mi marcha de Augsburgo, y que será pronto; ciertamente, me complacería. Me escribís también…, que tengo, yo también, a mi vez, que enviaros mi retrato…si sentís todavía algún amor por mí –lo que creo…-, ¡entonces, tanto mejor; tanto mejor entonces!..En otra esquela fechada del 13 de noviembre del mismo año le reclama Wolfgang Amadeus por no haberle enviado el retrato: “…y espero que sea como lo he pedido. Y sobre todo a la manera francesa…Si todavía sentís amor por mí, como yo por vos, entonces nunca dejaremos de amarnos…Beso vuestras manos, vuestra cara, vuestras rodillas, y vuestro…, en fin, todo lo que me permitáis besar…”
Pero la correspondencia no acaba aquí. El 28 de febrero de 1778 le escribe a Maria Anna Thekla: “”He tenido tanto que trabajar que podía pensar en mi prima, pero no podía escribirle…si pensáis en mí de vez en cuando…Me gustaría estar a vuestro lado para poder retozar a mis anchas con vos…” Para el 23 de diciembre de ese mismo año se registra otra esquela: “…Si tenéis tantos deseos de verme como por mi parte los tengo de veros, entonces venid vos misma a Munich…Podré entonces agasajaros, podré daros palmadas en el culo… Adiós, Ángel mío, corazón mío, os espero lleno de ansiedad”. Pero como Wolfgang planeaba casarse, uno se cuestiona cómo se sentiría su prima, se se habría ilusionado de alguna manera con él en términos sentimentales….De todas maneras, Maria Anna Thekla Mozart le acompañó en enero de 1779, en el trayecto de Munich a Salzburgo y permaneció allí con el cerca de dos meses pese a que Leopold desaprobó dicha visita.

Luego de la boda de su primo, parece que la posible pasión habida entre ambos se enfrió. Sabemos eso sí que sería madre soltera para el año de 1784: concibió una hija, Maria Josefa, hija del canónigo Theodor Franz de Paula María Barón de Reibeld, quien veló por su hija todo el tiempo.
Marianne Mozart permanecería toda su vida soltera. Al fallecer su madre, se traslada a vivir con su hija y su yerno, en 1808, después de haber perdido a su único nieto, Carl Joseph, en 1803.

Para el año de 1812 Marianne se muda a Kaufbeuren; dos años más tarde lo hacen a la ciudad de Bayreuth, donde habría de residir otros 27 años hasta morir. Cincuenta años después de su famoso primo, muere a la edad de 82 años; solo 15 meses más tarde también lo haría su hija.

Maria Anna Thekla Mozart ¿amante del prodigioso músico? ¿Confidente? Se especula mucho al respecto; posiblemente haya sido una mezcla de ambas, un refugio de pasión, curiosidad y ternura para Wolfgang.
[1] O Maria Ana Tecla, en nuestro castellano vigoroso.
[2] 17 de octubre de 1777.

MUERTE DE MOZART

La muerte de Mozart (un 5 de diciembre de 1791 en la ciudad de Viena) es un asunto bien enredado. Se ha especulado más de cien causas para la misma, incluyendo tuberculosis, desnutrición, envenenamiento, hidropesía cardiaca y depresión sicótica. Pero eso no es todo. Algunos avezados o «soñados» diría yo, han dicho que Mozart murió de Sífilis…a ver, casi todos los grandes hombres de los siglos XVIII y XIX fallecían por estas causas…

Pero independientemente de la dolencia o enfermedad que haya cegado su vida, los médicos de la época a lo sumo habrían practicado una sangría, le habrían puesto al paciente algunas compresas frías y no más. Tampoco ayuda el que jamás se la haya hecho una autopsia al cadáver.
Los contemporáneos afirmaban que Mozart había fallecido por «fiebre miliar severa», un calificativo tan amplio, que abarcaba cualquier síndrome caracterizado por una erupción por pústulas.
Historiadores medicos proponen una enfermedad renal en el genio de la música, debido sobre todo a la deformación de una oreja de Wolfgang. Esto obedece a que las orejas y los riñones se desarrollan aproximadamente al tiempo en el embrión humano; luego una oreja deforme puede indicar un inconveniente en los riñones. Pero nada más puede verificar este supuesto.
Otros dicen que fue un fallo cardiaco congestivo; su corazón posiblemente no fue capaz de bombear suficiente sangre a los riñones para eliminar las sales de desecho que ocasionan la retención de líquidos. Igual, sin pruebas.
¿Y si la epidemia de fiebre reumática que azotó a Viena por esos años lo hubiera afectado? La fiebre reumática es causada por una bacteria; el sistema inmunologico del cuerpo genera anticuerpos que atacan al invasor y en alguien débil tambien ataca hasta los tejidos del corazón, la piel, las articulaciones y el cerebro. Esto pudo causar el fallo cardiaco congestivo del que hablabamos.
La muerte de Mozart ha dado para cantidad de especulaciones y nada sabemos con certeza.

Leer también: historia de la música

Bibliografía Consultada
Mozart Wolfgang Amadeus. Jean Y Brigitte Massin. Turner Publicaciones, S.L. Madrid 2003.
Mozart. Biografia ilustrada. Erich Valentin. Ediciones Destino-Barcelona, 1961.

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