La luz contamina

La luz contamina, aunque usted no lo crea; la luz eléctrica, aclaro, la misma que no solo genera calor sino que incomoda nuestro ojos si es dirigida hacia ellos, la misma que impide que en las noches veamos el cielo estrellado cantado por nuestro poetas pues es tal la cantidad de luz o iluminación, que impiden a nuestros ojos adaptarse a la visión nocturna. Contaminación por luz, otra variedad de contaminación producto del despilfarro de una sociedad consumista, enseñada a la electricidad como fuente barata de energía. ¿cuanto dinero ahorraríamos si emplearamos bombillería más eficiente y dirigiendo la iluminación hacia abajo?

Ver: amor por la tecnologia

[adsense_id=»1″]

Rascacielos

Los rascacielos son sinónimo de edificios altos; ese será nuestro tema en este artículo.
[ad#ad-1]

Nacidos como respuesta al desordenado crecimiento horizontal de las ciudades, que propiciaba grandes tiempos de desplazamiento desde las periferias hacia el centro de las ciudades, como respuesta a economizar espacio y tiempo, disminuir la polución y permitir erigir estructuras bellas y funcionales. No obsta recordar que en un comienzo las estructuras altas trataban de acercar al hombre a los dioses, de ahí que no fuese gratuito que los primeros edificios altos o construcciones elevadas fueran por lo general las iglesias.
Los primeros edificios tendían a ser monotemáticos, pero la tendencia actual es que sean torres y edificios altos de diversos usos. Se trata de incorporar en una única estructura, hotel, oficina, apartamento y comercio; se maneja la idea de cubrir las necesidades elementales de la población residente en un radio de acción reducido, que implique desplazamientos a pie cada vez más y minimicen el empleo de vehículos automotores.[1]Los mega rascacielos[2], las mega construcciones como el Tokyo’s Sky City[3] (o ciudad en el cielo del Japón) pretenden incorporar en un único espacio, trabajos, compras, diversión y residencia, sin descuidar zonas verdes y espacios al aire libre. Pero levantar estas monumentales construcciones implican desarrollos tecnológicos estructurales que permitan contrarrestar la acción del viento a grandes alturas, resistir convenientemente los sismos, poseer soluciones prácticas frente a los posibles incendios en los pisos elevados, lograr implementar sistemas de transporte horizontal y vertical que agilicen los desplazamientos con un mínimo de esfuerzo por parte de las personas, estar provistos de los sistemas de alimentación de agua y energía con sus debidos sustitutos en momentos extremos y, por último, contar con módulos integrados pero de alguna manera aislables en caso de atentados terroristas. Y como colofón, una red de alta seguridad en sus alrededores.
[ad#ad-1]
[1] Véase: 100 de los edificios más altos del mundo. Ivan Zaknic, Mattew Smith & Dolores Rice. Editorial Paraninfo, Madrid 1999.
[2] Resulta paradójico ver como se canalizan grandes cantidades de recursos y de energía en levantar estos edificios altos en las grandes urbes, pero sobre todo para mejorar la calidad de vida de poblaciones que por si ya poseen elevados estándares de existencia, ingresos elevados, etc. Frente a estas colosales construcciones, casuchas de bahareque, de cartones, de plásticos, barrios de invasión, favelas, casas de material construidas folclóricamente, gente que sobrevive, economía informal, economía flotante (y es esta población, la que constituye mayoría en el mundo). Ojala algún día, alguien visione que en lugar de seguir fomentando la desigualdad, hayan accesos y oportunidades de lograr que estas poblaciones vulnerables, como la de los barrios populares y de invasión, como la de las casitas de pueblos y veredas, tengan acceso a elevar sus paupérrimas condiciones aspirando siquiera a “vivir” dignamente.
[3] Un mega proyecto que insta a que 35.000 residentes permanentes compartan su hábitat con 100.000 trabajadores, en una edificación de al menos mil metros de altura y más de 5.000 millones y medio de toneladas.

[ad#ad-1]

sistemas de almacenamiento

Sistemas de almacenamiento es un post de estudio que elaboré hace unos años y que ahora publico.

La historia de los sistemas de almacenamiento es bien representativa: desde la tarjeta perforada, introducida por Charles Babbage en su proyecto de “máquina analítica”, han pasado más de 150 años.
Durante este tiempo se han utilizado distintos sistemas de almacenamiento de información.
Repasemos los que han sido más importantes por sus prestaciones y por su popularidad, hasta 1998.

La tarjeta perforada, 1833: Charles Babbage introdujo la tarjeta perforada con su “máquina analítica”.

[adsense_id=»4″]

Se siguió utilizando hasta 1952, cuando Mauchly y Eckert crearon el “Univac 1”.

Cinta Magnética de media pulgada, 1952: Las principales ventajas de este sistema eran su gran capacidad de almacenamiento y su bajo coste. Almacenaban 800 bytes por pulgada.

Disco Duro, 1956: Con el “IBM 305 Ramac” se inicia la era del disco magnético. Almacenaba hasta 5 Mb de información.
El coste era de 10.000 dólares por Mb.

Casete de cinta, 1963: Desarrollado por Philips, pronto se convirtió en el sistema más popular de grabación musical. Fue vital para los comienzos de la microinformática.
Disquete de 8”, 1971: Un equipo de IBM, dirigido por Alan Shugart, inventa el disquete de 8 pulgadas, con una capacidad de 300 Kb, que permitía transportar los datos de un sistema a otro.
Disquete de 5,25’’,1972: Cuando aparecieron por primera vez podían almacenar 80 Kb de información, pero llegaron a almacenar hasta 1,2 Mb.
Disco duro integrado, 1980: Alan Shugart y Finis Conner, fundaron Seagate para desarrollar un disco duro de dimensiones reducidas, ideal para microordenadores.
Hoy siguen vigentes aunque de otros tamaños y especificaciones.

Disquete de 3,5’’,1981: Sony inventó y desarrolló el disquete de 3,5 pulgadas con una capacidad de 400 Kb por cara. Aún algunos pocos románticos los usan, aunque hay que tener en cuenta que algunos cuentan con 1,44 Mb de capacidad y otros hasta 2 Mb. Mejor dicho en un dispositivo viejito como esos no cabría ni una canción comercial en mp3.
Cd Rom, 1984: Las empresas Philips y Sony anunciaron las primera unidades CD-ROM (Compact Disc Only Memory) que podían almacenar hasta 650 Mb de información.

[adsense_id=»4″]

Disco óptico removible, 1985: El disco óptico removible se implantó como medio de almacenamiento durante la década de los 90. Conseguía almacenar hasta 650 Mb por cara.
Disco duro removible, 1990: Con una velocidad similar a los discos duros fijos, fueron una excelente alternativa en su momento, llegando a almacenar 5 GB de información, todo un acontecimiento de la época.
Disquete de alta capacidad, 1994:

[adsense_id=»4″]

Estas unidades superaban al disquete en capacidad de almacenamiento. Conseguían almacenar hasta 250 Mb de datos.
Dvd, 1995: El DVD (Digital Versatil Disc) se caracteriza por su gran capacidad de almacenamiento (entre 4,7 Gb y 17 Gb) que es de 7 a 26 veces mayor que la del CD-ROM.
Memory Stick, 1998: Almacenaban hasta 32 Mb. Sus aplicaciones eran innumerables gracias al reducido tamaño y a su naturaleza de estado sólido (no contiene partes móviles ni mecánicas).

Ver también: Toshiba q tb canvio usb 3.0 , limpiando virus