Juan II de Aragón es importante en la historia de España por méritos propios, pero nosotros lo trajimos egoístamente hasta nuestro blog por ser padre de Fernando II de Aragón, lo que nos permitiría entender mejor su tiempo. (El texto base de esta biografía corresponde a un viejo artículo que acabo de borrar en blogger)
Nacería Juan II de Aragón en Medina del Campo, actual España, 29 de junio 1398 y moriría en Barcelona, enero 20 de1479. Rey de Aragón (1458-1479) y de Navarra[1] (1425-1479). Segundo hijo de Fernando de Antequera (Fernando I) y Leonor de Alburquerque.Es considerado Juan II de Aragón como uno de los reyes más memorables y sin escrúpulos del siglo xv.
Contrajo nupcias con Blanca, reina de Navarra, por lo que se convirtió en rey consorte de este reino[2]. Sus afectos lo hicieron apoyar el partido agramontés; por supuesto sus contrarios, los Beamonteses le recalcaban que dadas las capitulaciones matrimoniales, ya muerta la reina Blanca, Juan no debía ser tratado como rey, puesto que su hijo Carlos, príncipe de Viana[3], ya era mayor de edad. Pero en el testamento de Blanca existía la salvedad que su hijo Carlos solo podía coronarse con el consentimiento de su padre.
Luego de la muerte de la reina, Juan II se casó con la castellana Juana Enríquez, matrimonio que no fue bien recibido en Castilla. Había Combates en dicha frontera. Tensa estaba la situación hasta cuando Álvaro de Luna se entrevista con Carlos de Viana[4] y acuerdan tregua para disgusto de Juan, quien de inmediato envía a su esposa Juana para que se hiciese cargo de gobierno navarro (camino a cumplir esta misión nace Fernando, futuro Fernando el católico).
Como no hubo consenso se enfrentaron padre e hijo, dando comienzo a la guerra civil en el reino.
Su hermano Alfonso V[5] le ofrece el virreinato de Cataluña, donde María tenía inconvenientes para lidiar con las cortes del principado. No ha mucho que la quiebra del crédito bancario sumado a una peste negra devastadora, tenían colapsada la economía barcelonesa. Comarcas enteras habían quedado despobladas. Terratenientes y burgueses estaban vueltos contra su soberano, quien había creado el sindicato remensa en 1448. Pero el enfrentamiento con Carlos de Viana continuaba. A continuación Juan II deshereda a Carlos y le transfiere los derechos a su hermana Leonor casada con Gastón de Foix y leal a la causa de su padre. Del otro bando se hallaban Blanca, su hija, la Generalidad y los notables catalanes junto a Carlos de Viana como garante de los privilegios de la aristocracia local. Derrotado Carlos huye hacia Italia buscando la protección de su tío Alfonso V, quien trató de crear las condiciones para una reconciliación familiar.
Tras la muerte de su hermano Alfonso V, Juan se convirtió en rey de Aragón. Carlos viaja a conciliar con su padre (quien propiciaba la candidatura de la sucesión aragonesa en la persona de Fernando). De inmediato Carlos de Viana entra en conversaciones secretas con Enrique IV de Castilla para emparentar con la infanta Isabel y de paso ganar posiciones frente a su padre. Debido a estos movimientos que atentaban contra las aspiraciones encarnadas en Fernando, ordena el rey el arresto de Carlos, en Lérida, acusado de connivencia con el monarca de Castilla.
No obstante la reacción popular de sus nuevos súbditos[6] lo obligó a liberar a Carlos de Viana, a la sazón encarcelado[7], y a reconocerlo como heredero, a través de las capitulaciones de Vilafranca en 1461[8]. Pero el estado de cosas tal cual se plantea allí duró poco. A los cuarenta años fallece en Barcelona el Príncipe de Viana, «el príncipe perfecto» de una complicación pulmonar, tal vez tuberculosis. Fue enterrado en el monasterio de Poblet, morada última de los reyes de Aragón.
Muerto Carlos, y con el reino en desorden a causa de los enfrentamientos entre la oligarquía, atrincherada en la Generalitat, y los sectores populares y los payeses remenses, que buscaban el apoyo real, se produjo un alzamiento que obligó a Juan a abandonar Cataluña[9].
Tras lograr ayuda exterior, contraatacó y recuperó Barcelona en 1472, pero se mostró muy comedido en las represalias.
En su vejez Juan II de Aragón quedó ciego como consecuencia de cataratas en los ojos, pero un médico judío (Abiathar Crescas) logró que recuperara la vista. A su fallecimiento, Aragón pasó a su hijo Fernando, por entonces ya casado con Isabel de Castilla.
[1] Como todos los territorios encajonados entre monarquías poderosas, poseía problemas limítrofes y de intereses creados hacia su territorio. En este pequeño territorio se formaron dos partidos enfrentados: los Beamonteses(por Carlos de Beamont, primo de Carlos el noble; representaban el norte, la economía pastoril y la montaña) y los Agramonteses (de la familia Agramunt, pertenecían al Sur, a la economía agrícola)
[2] Hijo de rey y hermano de rey, lo lógico era que aspirara a alguna corona; de ahí que fuera entendible su acercamiento al trono navarro. Doña Blanca era hija de Carlos el Noble. Como cosa curiosa tenía doce años más que su pretendiente. En las capitulaciones se dejó estipulado que Juan solo sería considerado soberano hasta la muerte de su esposa; luego la sucesión se resolvería por estricto orden cronológico de nacimiento de sus hijos, que fueron tres: Carlos, nacido en 1421, Blanca y Leonor. Por supuesto la necesidad política estaba a la orden del día y era menester buscar alianzas internacionales, previendo su posible ascensión al trono aragonés en vista de la no descendencia de su hermano. A Carlos lo casó con Inés de Cleves, sobrina del duque de Borgoña; Leonor fue prometida a Gastón de Foix y su hermana Blanca, a Enrique, príncipe de Asturias y heredero al trono de Castilla.
[3] Título creado por Carlos el Noble expresamente para su nieto.
[4] Inicialmente fue nombrado gobernador general de Navarra (algo así como un virrey)
[5] Quien había escogido el catalán como lengua oficial de la corte aragonesa, fundador y patrón de la Universidad de Barcelona.
[6] Dentro de los cuales hemos de incluir a los diputados de La Biga.
[7] Inicialmente en el palacio de la Aljafería de Zaragoza y luego en el castillo de Morella. Aquí entra en juego una tesis interesante que pone en vilo toda la historia sobre Colón y el descubrimiento de América. Dicen los defensores de tal historia no oficial de Cristóbal Colón, (que haciendo honor a la verdad ayuda a solucionar muchas lagunas y contradicciones respecto del Almirante) que Carlos de Viana estuvo encerrado en la Isla de Mallorca (Felanitx) y que allí tuvo una amante, Margálida (Margarita) Colom, fruto de cuya relación nacería como hijo natural el ilustre navegante.
[8] Además de prohibirle a Juan la entrada en territorio catalán salvo que la Generalidad así lo autorizase.
[9] Había convocado a Cortes del reino de Aragón en Calatayud y allí Fernando fue designado primogénito y heredero del reino. Valencia parecía propicio. No así Cataluña, donde aspiraba colocar a Fernando como lugarteniente del principado, pero era bastante difícil que lo aprobaran por la edad del aspirante (9 años). Pero dado quien aspirara a tal honor había de residir en dicho principado, envía a Fernando y a su madre a residir en Barcelona. Las autoridades reconocen a Fernando como gobernador (Juan no podía ingresar al territorio). Pero pugnas internas entre La Biga y La Busca, hicieron cometer errores diplomáticos a Juana Enríquez, que jugaba a atender a uno y a otros. La Generalidad organiza un ejército para hacer volver ala reina y a su hijo (que habían huido a Gerona); Juana era apoyada por los agricultores y por el obispo de Gerona Joan Margarit; se atrincheró allí a esperar ayuda de su esposo Juan. Este obtiene apoyo de Gastón de Foix, esposo de su hija Leonor; negocia también con Luis XI de Francia la entrega del Rosellón y la Cerdeña a cambio de apoyo militar. En este ambiente de guerra se levantó el infante Fernando.
Ver también: Posicionamiento web Madrid
Ediciones 2013-18
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