Hernando Colon o Fernando Colon (en italiano Fernando Colombo), Córdoba 15 de agosto de 1488-Sevilla 12 de julio 1539. Segundo hijo de Cristóbal Colón. Su madre era Beatriz Enriquez de Arana. Llegaría a ser el más importante historiador de su padre, el Almirante.
Antes de desarrollar un esbozo biográfico de Hernando Colón voy a dedicar unas palabras a doña Beatriz Enriquez y su familia, de tal forma que nos permita entender un poco el entorno donde creció el protagonista de nuestra historia. La familia de doña Beatriz era de posición social humilde, hija de pequeños agricultores, don Pedro de Torquemada y Ana de Arana. Muchos se han preguntado si acaso no eran parientes de Tomás de Torquemada y tal vez, cristianos nuevos o marranos. Beatríz habría quedado huérfana muy pequeña y habría sido criada por parientes (se especula que con el con el vinatero Francisco Enríquez de Arana)y estaría con ellos hasta cuando conoció a don Cristóbal Colón.
Siendo hijo natural o ilegítimo, Hernando Colón estaba privado de ser heredero de bienes, honras, dignidades y honores que correspondieran a los padres. Para hacerse acreedor al apellido Colón debía suceder que doña Beatriz se casase con Cristóbal Colón (cosa que no sucedió, tal vez por temor de la primera a hacer del Almirante, blanco de las sospechas de la inquisición por tratarse su familia, la de ella, de cristianos nuevos (o tal vez por los orígenes humildes de doña Beatriz). Otra alternativa era que Cristóbal legitimara a su hijo. Para que esto fuera posible fue menester presentarlo ante los reyes haciendo la respectiva declaración de paternidad.
En 1494 entró como paje, junto con su hermano Diego, al servicio del príncipe Don Juan, heredero de los Reyes católicos, puesto que ocupó hasta la muerte de aquél (1498) en que pasaron ambos hermanos al servicio de la reina doña Isabel también como pajes, recibiendo en el proceso una esmerada educación. Para los que crean que ser pajes era como ser sirvientes de baja ralea, un par de líneas al respecto. Los pajes todos eran hijos de la nobleza más florida de Castilla . El tutor de los pajes era el humanista Pedro Mártir de Anglería, milanés, futuro cronista de Indias y amigo personal de Colón.
Hernando recuerda que estando en Granada les espetaban: “Mirad a los hijos del Almirante de los mosquitos, de sepulcro y miseria de los hidalgos castellanos…”. Esta clase de comentarios sobre su pasado plebeyo (se asume tradicionalmente que por vía materna) es lo que “obliga” a Hernando a mencionar muy pocas veces a su madre Beatriz. Su padre Cristóbal solo lo hizo tres veces (*) y su hermano Diego tan solo una vez.
Sabemos que el 6 de noviembre de 1519 Beatriz Enríquez venderá a Juan Ruiz dos casas de su propiedad por valor de 52.000 maravedís. ¿Lo haría por necesidad? ¿Por capricho? ¿Negocios tan solo? Nada sabemos.Algo de su pasado materno pesaba como lastre en la conciencia de Hernando, hasta el punto de guardar tanto silencio respecto a las actividades maternas. Tan solo en un documento familiar (escritura) de 17 de agosto de 1525, donde transfiere a Pedro de Arana[7], “mi primo”, unas casas y bienes heredadas tras la muerte de su madre.
En 1502, siendo casi niño, acompañó a su padre en el cuarto viaje a las Indias, sufriendo todos los trabajos y penalidades de la travesía con gran valor. Falleciendo su padre, parece que hizo otros viajes a las Indias, uno de ellos en 1509, en compañía de su hermano Diego.Acompañó al emperador Carlos V a Italia, Flandes y Alemania, y recorrió, según Zúñiga, el resto de Europa y parte de África y Asia, adquiriendo notables conocimientos de historia natural, navegación y geografía, reuniendo además una rica biblioteca de más de 20.000 volúmenes, que fueron la base de la actual Biblioteca Colombina, los cuales al morir legó a la catedral de Sevilla, en cuyo templo fue enterrado. En 1530 parece que abrazó el estado eclesiástico y, autorizado por el emperador, proyectó la fundación de una Academia-colegio de matemáticas en aquella ciudad que se llegó a realizar a causa de su temprana muerte, debida principalmente a las penalidades sufridas en sus viajes.[2]
[1] Fecha calculada por su albacea testamentario Marcos Felipe, basada en sus recuerdos personales.
[2] Enciclopedia Universal Ilustrada europeo americana. Espasa Calpe S.A. Madrid 1979.
COLON HERNANDO. Historia del Almirante. Edición de Luis Arranz. Historia 16, Madrid 1984, estudio previo, páginas 7-13.
(*) La primera el 24 de mayo de 1493 respecto a la Mercer de los 10.000 maravedís concedidos por los reyes a Colón como quien primero avistó tierra. Esta renta vitalicia se situaba en las carnicerías de Córdoba, que Colón traspasó a Beatriz.
En 1502 poco antes de partir a su cuarto viaje, ordena a Diego que vele por Beatriz Enríquez “por amor de mí, atento como teníades a tu madre: haya ella de ti diez mil maravedís cada año, allende de los otros que tiene …”
La tercera referencia está en su testamento, donde condiciona a su heredero Diego a que no descuide a Beatriz y la provea de todo lo necesario para vivir “como a persona a quien soy en tanto cargo. Y esto se haga por mi descargo de conciencia, porque esto pesa mucho para mi ánima. La razón dello non es lícito de la escribir aquí”.
Ediciones 2014-18
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